Descubre qué tipo de sierra necesitas y qué puedes hacer con ella

Tras tanto tiempo retrasando la tarea, por fin te has decidido a reconciliarte de nuevo con el bricolaje. Sin embargo, no todas las herramientas y máquinas valen para lo mismo. Lo primero será determinar qué tipo de trabajos quieres hacer y el material con el que vas a trabajar.

Sierras de calar

Las sierras de calar están muy presentes en nuestros hogares, gracias a su versatilidad y su manejo mucho más sencillo. Principalmente, se usa para cortar maderas y plásticos. Aunque podríamos considerarla como un todo en uno si cambiamos las hojas.

Así, podríamos trabajar incluso con metales, ladrillo, cerámica, vidrio, etc. Su hoja sube y baja repetidamente para producir el corte, aunque las hay también de movimiento pendular hacia delante y hacia atrás. Te permite hacer cortes rectos, curvos o inclinados con la máxima seguridad. Si ya tienes una sierra en casa, probablemente sea esta.

Sierras de mesa

Si trabajas mucho con madera pero tus trabajos son de gran envergadura, no te bastará con una sierra al uso. Necesitarás una máquina mucho mejor adaptada a tus necesidades. No solo por seguridad y ahorrar tiempo, sino por mejorar tus resultados.

Con una sierra de mesa conseguirás no solo más potencia, sino más exactitud y precisión de corte. También es cierto que no es una herramienta precisamente portátil, debido a su peso y su tamaño. No obstante, será la opción más cómoda y eficiente cuantos más objetos trabajes.

Sierras ingletadoras

Llegamos a otro tipo de máquina muy precisa. Las sierras ingletadoras guían el serrucho a través de una tabla para ejecutar cortes angulares de incluso 45 o 90 grados. Utilizadas principalmente por los carpinteros, es una opción excelente para trabajar la madera.

Sierras tronzadoras

Las sierras tronzadoras son herramientas sumamente poderosas, ya que gracias a ellas podremos realizar multitud de cortes en metales. Son además enormemente eficientes. Por ello, son muy utilizadas por los profesionales del bricolaje.

Muy apreciadas en trabajos dentro del sector de la construcción y de la plomería, hacen un gran trabajo cuando se trata de realizar instalaciones o reparaciones de todo tipo de piezas. Podrás cambiar de hoja en función del tipo de corte que vayas a ejecutar.

Sierras circulares

Podría decirse que este tipo de sierra es un todo en uno. De hecho, es una de las herramientas más utilizadas, ya que permite cortar plásticos, yeso y metales o ferrosos. Como ya te estarás imaginando por su nombre, consiste en un disco circular dentado y metálico.

Los dientes de su borde giran a gran velocidad para cortar el material a la mayor rapidez. Incluso algunos modelos llevan dientes con puntas de carburo. Dependiendo de su tamaño, el corte será más o menos profundo. Está accionado por un motor generalmente eléctrico.

Sierras de cinta

La sierra de cinta resulta muy conveniente para cortar madera y metales, entre otros. Pero sobre todo, es por la que deberías decantarte si deseas realizar cortes curvos o irregulares, debido su gran precisión y estabilidad.

Que no te intimide la gran variedad de modelos disponibles en el mercado, ya que encontraras modelos más portátiles y manejables, como otros de mayor envergadura y mucho más pesados. Como siempre, conocer el tipo de trabajo más frecuente que vas a realizar es la clave.

Sierras de marquetería

La sierra de marquetería es una herramienta estacionaria con una hoja que va cortando el material con su movimiento alternativo. En lugar de mover la sierra, movemos el material según lo queremos ir contando. Por  tanto, es una máquina excelente para ahorrar esfuerzo.

Sierras de sable

Y llegamos por último a las sierras de sable. Si hay un tipo de sierra versátil al máximo, es esta. Perfectas para realizar cortes con el mínimo esfuerzo y la mayor rapidez, te permitirá terminar cortes con gran exactitud y precisión.

Por si eso fuera poco, su tamaño y ergonomía las hacen una herramienta más manejable que muchos otros tipos de sierras. Desde las sierras de sable más baratas y asequibles para uso casual, hasta los modelos más orientados al profesional, si eres mucho más exigente con los acabados de tus trabajos.

Si llevas tiempo pensando en qué sierra de sable comprar, o te has mareado en más de una ocasión al ver la gran cantidad de tipos de sierras disponibles ahí fuera, no te preocupes. Estás a un paso de descubrir qué sierra de sable comprar.

 Como ves, hay una sierra para cada tarea. Tanto si vas a darle vida a esa pequeña estantería que diseñaste sobre el papel, como si vas a construir una gran mesa de comedor, con las herramientas adecuadas y una buena dosis de motivación, no habrá material ni trabajo que se te resista. ¡A por ello!