Los cofrades -otra vez- señalados como los malos de la película

Lo malo no ha sido lo que ha dicho el párroco de San Miguel. Él entiende que las cosas son así, y mientras esto no cambie -que quizás algún día cambie- a los demás sólo nos toca obedecer. El problema está, una vez más, en las formas. Está en la difusión que se ha hecho del ya famoso 'wasap' remitido por el sacerdote al Consejo, o a quien sea. Está en la forma de expresar una obviedad, con unas artes poco recomendables para quien tiene que ejerecr un ministerio nacido de la bondad de Cristo. Y sobre todo, está en el flaco favor que don Manuel ha vuelto a hacer a los cofrades.

El problema no es que suene un pasodoble, o que no deba hacerlo detrás de un paso de palio. El problema no está en que los gastos haya que pagarlos si es que se originan. No. El problema está en que no hay derecho a poner a los cofrades a los pies de los caballos, señalándolos de nuevo como los malos de la película. Como los únidos malos de esta película.

Luego se quejarán en el Obispado, de que noy nadie que quiera presentarse a una junta de gobierno ¿Quién se va a querer presentar, para tener que lidiar con semejantes artes?
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Publicidad ¿Se hace bien todo en las cofradías? Para nada. Pero una cosa es la fraternal corrección, y otra muy distinta, la bronca sin venir a cuento, como es el caso que nos ocupa. Y la verdad, es que es una lástima que a tres días mal contados de la Semana Santa... de la magnifica Semana Santa que tenemos en Jerez, los cofrades estemos de nuevo señalados, como si fuésemos personajes insidiosos y molestos, que no tenemos otra cosa mejor que hacer que tocarle las narices a los curas.
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Publicidad No don Manuel. Usted perdone, pero se ha vuelro a aquivocar con nosotros. Una pena. Ah. Y por cierto. Si cree que estamos equivocados de nuevo, y que la culpa de este revuelo la tiene quien ha publicado su mensaje, ya sabe usted a quien tiene que pedir responsabilidades.