Nunca antes había odiado a un personaje de ficción.
El protagonista de las 863 páginas que acabo de terminar de leer es lo más ruín que puedes echarte a la cara.
Lo odié desde el principio. Y siempre fue a más.
Cuando era pequeño no fue el clásico niño inquieto y travieso que se le califica erróneamente de malo. No, este tenía siempre malos sentimientos y acciones.
Ya de joven fue a peor. No quería a nadie, ni así mismo. No era feliz y tampoco dejaba que los demás lo fueran. Le gustaba hacer daño. Era como más feliz se sentía.
De mayor se portaba como un canalla, verdaderamente el nombre está bien elegido. A cada página que pasaba más lo aborrecía, un tío malvado, sin escrúpulos. Feo, bajo, de piel cetrina como él mismo se definía… Sin formación pero con una familia bien posicionada que le protegía las espaldas. Fue su colchón durante largo tiempo, hasta que con malas artes, cómo si no, fue teniendo golpes de suerte en el mundo de la publicidad.
Cayó donde mejor podía irle. En los negocios sucios. en los turbios mecanismos que en ocasiones, como dice su autora, emplean los centros de poder para conseguir sus fines. El atravesó todas las líneas rojas.
Nunca entendí, y más lo odiaba por ello, como podían quererle su familia, o su mujer después. Las demás pasaban por sus vidas por dinero. Pero él las destruía, las utilizaba , para después tirarlas.
Julia Navarro ha sabido jugar con nuestros sentimientos. Nos ha llevado por su vida arrastras. Buceando en la historia de un ser miserable: Thomas Spencer.
Es por tanto una novela psicológica, donde a través de su protagonista va diseccionando la codicia, la ambición del ser humano. Pero ÉL se escapa, supera con creces a todos. Es el más miserable.
No se arrepentía jamás de sus malas acciones, ni se preocupó nunca a lo largo de su azarosa vida qué cadáveres dejaba por el camino.
Me asombraba que personas tan buenas como sus padres o su adorable hermano podían quererle y aguantar tantos desprecios. Al final…
Bueno, dejo el the end para quien lean Historia de un Canalla de Julia Navarro
Julia solo decirte que me tuvo enganchada varias noches hasta tarde. Iba cargada del libraco de un lado a otro.
Me llevaba el personaje con sus fechorías y ruindad a la cama y hasta la playa.
Me pregunto si habrá muchos Thomas por el mundo? o Tomás, su nombre latino…Seguro que sí. Pues que no te pille ninguno y si aparece en tu camino aléjate, que no te deje seducir el dinero, ni te vendas por una fama efímera.
Es un libro, pero podría ser una vida. Yo me la tomo como tal, porque cada novela que leo la hago parte de mi.
Vivo en su mundo por unos días y noches. Incluso cuando la acabo tardo algo en quitarme de encima el peso de sus vidas.
Gracias escritores . Gracias Julia