Verdi llegó a componer cuatro óperas con asunto español: Ernani (1844), Il trovatore (1853), La forza del destino (1862), y Don Carlo (1867). El gran maestro de la ópera italiana, Giuseppe Verdi (1813-1901), llegaría a Madrid la mañana del 11 de enero del año 1863 acompañado de su segunda esposa Giuseppina Strepponi. Su presencia se debía a motivos profesionales, como era dirigir personalmente, en el Teatro Real de Madrid, su última ópera "La forza del destino", basada en la obra del Duque de Rivas, "Don Álvaro o la fuerza del sino".
El estreno de la ópera en Madrid el 21 de enero obtuvo un éxito enorme, y todas las representaciones se hicieron a teatro lleno. En su primera representación asistió la misma reina, Isabel II, además de los escritores Pedro Antonio de Alarcón, Rosalía de Castro y el propio Duque de Rivas.
Verdi contaba 50 años cuando a principios de marzo inició su amplio periplo por España, país que deseaba conocer por muchos motivos. El clima del periodo invernal y las malas condiciones de los transportes por unas carreteras y ferrocarril deficientes, no impidieron que el prestigioso músico y su mujer disfrutaran del arte y los parajes de una España casi incógnita todavía.
El intenso pero apasionante viaje incluyó buena parte de Andalucía: Córdoba, Granada, con su mágica Alhambra, Sevilla, donde se alojarían en el Hotel Fonda de Inglaterra, Cádiz, Málaga y, por supuesto, Jerez. En nuestra ciudad, conocida en el mundo entero por sus famosos caldos, adquiere un barril de tan prestigioso néctar con motivo de la visita a una de las bodegas, que muy posiblemente fuera González Byass. Finalmente, volverían a Francia en tren.
Tal era su interés por España y su cultura que Verdi llegó a componer cuatro óperas con asunto español: Ernani (1844), Il trovatore (1853), La forza del destino (1862), y Don Carlo (1867).
En su ópera Falstaff, de 1893 y basada en las obras del bardo inglés, William Shakespeare, las referencias al sherry son constantes en la representación. No en balde Falstaff era apodado con el mote de tonel de jerez. Muy posiblemente nuestro sherry ayudaría a su inspiración cuando trabajaba en la que sería su última obra. Quien sabe.