¡¡¡Inocente, Inocente!!! Con esas palabras eran recibidos en el día
de ayer quienes pinchaban en la noticia que preparamos por el Día de los
Inocentes, día en el que habitualmente la prensa española hasta gastado
bromas en forma de noticas desde tiempo casi inmemorial. Y con esa
intención y no otra, con la de 'quedarse' con el personal, fue publicada
ayer en nuestra sección de Flamencomanía la ‘noticia’ de que el Teatro
Villamarta cancelaba el Festival de Jerez. Como cada uno tienes sus
gustos, unos la han tildado de pesada y otros la han catalogado de
magnífica. Nosotros ahí no vamos a entrar, eso lo dejamos a su decisión.
Solo con darse una vuelta por las redes sociales veráopiniones de todos
los gustos.
A los que se la hemos 'colado' y se lo han creído al 100%, solo
podemos decirle que estén pendientes del calendario, sobre todo a final
de año y, obviamente, no podemos hacer otra cosa que pedir disculpas a
quienes se hayan sentido ofendidos, aún cuando lo que más pena nos ha
dado es ver como muchas personas han dado como cierta o probable una
noticia que esperemos que no se produzca nunca. Otros han tratado de
matar moscas a cañonazos. No nos creíamos tan importantes, todo sea
dicho.
Lo único cierto, y esto sí que no es una inocentada, es que el Festival de Jerez sigue su curso,
no se va a cancelar, y hasta la propia directora ha manifestado en
varias ocasiones que el problema financiero del Teatro Villamarta no
radica en los gastos en festivales sino en gastos corrientes. Por si
alguno no sabe lo que son estos gastos, les indicamos que ahí entra lo
que viene siendo nóminas, con sus antigüedades y pluses, seguros
sociales, luz, agua, comunicaciones y ese tipo de gastos fijos que tiene
cualquier empresa por muy grande o pequeña que sea.
Por el bien, no solo de los trabajadores del teatro, que están en una
situación en la que el futuro se les presenta incierto, sino porque el
Festival de Jerez es la única opción que tienen los aficionados de esta
tierra de poder disfrutar de otras propuestas escénicas, tanto de cante,
baile y toque, distintas a las que habitualmente llevan la etiqueta
‘made in Jerez’, afortunadamente el Festival de Jerez lleva dos décadas
de existencia cumpliendo este cometido y ha sabido hacerse un hueco como
uno de los modelos a seguir en este tipo de propuestas de gran formato.
Nosotros se lo contaremos como siempre.